RESPUESTA A
DECLARACIONES
DE PRESIDENTE REGIONAL
DE AREQUIPA
El viernes 13 de los
corrientes en declaraciones periodísticas a diversos medios de comunicación el
Presidente Regional de Arequipa, Juan Manuel
Guillén Benavides, ha dicho que el “Proyecto Tía María debe ir”, “debe
ir pero con licencia social”, etc. Al respecto el Partido Comunista del Perú –
Patria Roja se ve en la imperiosa obligación de pronunciarse en los siguientes
términos:
1ro.- Cuando la empresa Southern Copper Corporation,
integrante de la transnacional Grupo México, y el corrupto gobierno alanista se
empecinaron en pretender ejecutar el proyecto Tía María entre los años
2006-2011, el comportamiento de Guillén Benavides fue de frontal respaldo bajo
un manto de ambivalencia, vaivenes, idas y venidas y acomodamientos según las
circunstancias se presentaban. Nunca ha tenido una posición firme, consecuente
ni principista, como la asumida por ejemplo por el Presidente Regional de
Cajamarca, compañero Gregorio Santos Guerrero.
2do.- Fue la población
organizada de la provincia de Islay la que se organizó y levantó en lucha,
conducida por la Coordinadora Contra la Agresión Minera, realizando una
multifacética labor, primero a través de la Consulta Popular de 2009 (que fue
petardeada y boicoteada por Guillén Benavides), segundo con los paros y
movilizaciones de 2009, 2010 y 2011 (que igualmente recibieron críticas del
titular regional) y finalmente con el tercer paro provincial del 2011 que
obligó a que el gobierno aprista desaprobara el EIA y dispusiera el retiro de
Southern.
3ro.- Hoy nuevamente el
Presidente Regional se muestra tal como es: sumiso ante los grupos de poder
económico y político, y contrario a la población de las provincias como Islay
que no tienen alma de esclavos ni están dispuestas a tolerar se pisotee su
dignidad. Sus declaraciones no son casuales. Se producen luego que el
editorialista del diario Correo de Arequipa se lanzara afiebradamente contra el
movimiento popular de Islay y de sus dirigentes y organizaciones representativas
y a favor de Tía María. Después del vergonzoso y descarado viraje a la derecha
de Ollanta Humala quien de candidato se comprometió a respetar la Consulta
Popular y de presidente dice y hace exactamente lo contrario. Luego que Southern
prepara tras bambalinas un nuevo EIA y ha desatado una ofensiva a través de
“ONGs”, “asociaciones”, “donaciones”, “colaboraciones”, “pasantías”, compra de
periodistas, autoridades y hasta dirigentes.
4to.- El Señor Guillén
Benavides ha ”olvidado” que la Consulta Popular tuvo como resultado que más del
90 % dijera NO a la inversión minera y se respete la agricultura, la pesquería,
el turismo y los servicios. Ha “olvidado” que la lucha del pueblo de Islay tuvo
un elevado costo de 3 ciudadanos muertos por las balas asesinas del gobierno
alanista: ANDRES TAYPE CHOQUEPUMA, AURELIO CLEMENTE HUACARPUMA Y NESTOR CEREZO
PATANA, además de decenas de detenidos, centenares de heridos y varios
dirigentes denunciados y enjuiciados. Ha “olvidado” también que fue la UNOPS,
una entidad especializada de las Naciones Unidas, la que formuló más de 150
observaciones muchas de ellas insalvables y que fue el puntillazo final para
que el ministerio de energía y minas desestime el expediente de Southern.
5to.- Sepa usted Señor
Guillén Benavides que el Grupo México es un conglomerado de empresas que
abarcan actividades desde transporte (tres compañías ferroviarias), construcción
(tres compañías perforadoras y constructoras), aeropuertos (una compañía con 12
aeropuertos en México), hasta minería (tres compañías: Southern Cooper Corporation,
Minera México y Asarco). Esta transnacional no se caracteriza por un “buen
comportamiento” habiendo sido sancionada en su propio país y en Estados Unidos
por violar constantemente la legislación y el ordenamiento legal empresarial,
incluídas sus actividades en minería. Absolutamente nada garantiza que se
cumplirán los ofrecimientos, promesas y “compromisos” que solícitamente dice
estar dispuesta a materializar.
6to.- Sepa usted Señor
Guillén Benavides que lo sustancial, lo fundamental, reside en que el proyecto Tía María está ubicado a menos de 3 kilómetros de poblaciones
como Cocachacra, El Arenal, La Curva, que basan su medio de vida en la
actividad agropecuaria, a corta distancia del río Tambo que es también fuente
de trabajo de pescadores artesanales, a un poco más de 4 kilómetros del
Santuario Nacional Lagunas de Mejía, último acuífero y lugar donde decenas de
miles de aves pueden guarecerse antes de ingresar al desierto de Atacama en su
cíclico traslado aéreo y a un poco más de 5 kilómetros del océano Pacífico que
contiene riquezas y especies ictiológicas que serán impactadas por la actividad
minera. La población, la ciudadanía, los agricultores, los pescadores, los
operadores turísticos, los que brindan servicios no están de acuerdo no por
culpa de “agitadores”, “extremistas”, “antimineros” sino por intuición y hasta
por instinto, porque saben que la actividad minera los agredirá y perjudicará.
7mo.- Señor Guillén Benavides, la provincia de
Islay le vuelve a plantear lo que se propuso entre el 2006 y 2011: que se
realice con rigurosidad científica la zonificación ecológica, que la cuenca del
Tambo se declare intangible para la minería, que se amplíe la frontera agrícola
en los terrenos en los que se pretende ejecutar el proyecto Tía María y en
otros terrenos en los que existen hace décadas asociaciones. Esto es
completamente lógico, razonable y sensato. Sin embargo, la voracidad, la
angurria y el apetito insaciable de ganancias de las que hacen gala los grupos monopólicos,
oligopólicos, las transnacionales, corporaciones y multinacionales como
Southern Copper del Grupo México son las que pretenden imponer sus designios avasallando pueblos, distritos,
provincias, regiones y países, convirtiendo a autoridades y gobiernos de turno
en simples sirvientes.
Provincia de Islay, 14 de Setiembre de 2013.
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